04/09/2022

Jóvenes en Camino, una experiencia de Camino de Santiago

El hilo conductor de este Camino ha sido la campaña "Juntos: Actuemos hoy por un mañana mejor", que pone el acento en la ecología integral, es decir, en la necesidad de cuidarnos las personas y cuidar del planeta al mismo tiempo.

Hola, somos Anamaría y Lidia, dos voluntarias de la Cáritas Joven de Elche que hemos vivido la experiencia del Camino de Santiago y queremos compartirla.

En primer lugar, queremos agradecerle a nuestro técnico Diego el haber caminado a nuestro lado en todo momento y confiar plenamente en nosotras. Este camino no hubiese sido lo mismo sin él… Gracias Diego por la escucha, por los abrazos y por todas las risas.

Aunque el camino fue duro pensamos que ha merecido completamente la pena por el hecho de haber podido conocer a otros voluntarios jóvenes de toda España y la labor que realizan en sus Cáritas diocesanas. Además, hemos descubierto que el verdadero camino no comenzó en Sarria sino al llegar a Santiago de Compostela. Nosotras creemos que gracias a esta experiencia hemos logrado empaparnos de otras realidades para así poder construir juntos un mañana mejor, un mundo mejor y una Cáritas mejor para todas.

De todos los proyectos y labores que realizan nuestros compañeros y compañeras hubo uno en concreto de la Cáritas de Santiago de Compostela que nos llamó muchísimo la atención, Vagalume. Este Programa intenta ayudar a las mujeres que son víctimas de trata a salir de esa situación. Ambas nos hemos dado cuenta que en nuestra Cáritas no tenemos ningún Programa que se encargue directamente de este tipo de realidades y por eso pensamos que es hora de cambiar esto.

A nivel personal nos llevamos nuestra mochila más llena, llena de amigos y amigas increíbles, de crecimiento personal, de amor, de romper con muchos miedos e inseguridades pero sobre todo llena de ganas de luchar por los demás, de ser mejor persona para todos aquellos que necesitan una sonrisa en su día a día pues la experiencia del camino nos ha hecho el corazón más grande.

Por último, hemos aprendido que el cambio en el mundo empieza en nosotros mismos y que a veces es necesario parar y darse cuenta de que no tenemos por qué correr pues a donde tenemos que llegar es a nosotras mismas. ¡Buen camino!